Esta vez les traemos una breve historia de uno de nuestros participantes masculinos en el programa de intercambio cultural Pohod na Istok. Admir se unió al programa en marzo de este año, comenzó su aventura en Shanghai y la continuó en la vibrante ciudad de Shenzhen. Esto es lo que nos contó:
En primer lugar, Shenzhen es absolutamente preciosa, repleta de vegetación y palmeras, rodeada de montañas y mar. Después de Shanghái, se respira un aire más limpio.
Admir ha creado un gran vínculo con su familia de acogida desde el principio:
La familia es maravillosa. Han hecho un gran esfuerzo para que me sienta bienvenida y como en casa. Me recibieron con un ramo de flores y pasamos juntos los tres primeros días explorando Shenzhen. Durante el Festival del Bote del Dragón, me enseñaron todas las costumbres tradicionales y me contaron antiguas leyendas chinas.
Está cuidando a un niño de cinco años y disfruta mucho trabajando con él, incluso cuando el pequeño se burla un poco de él. Admir ve en ello la oportunidad perfecta para mejorar sus aptitudes pedagógicas. Como ya sabe un poco de chino, pasar tiempo con el niño también le ha ayudado a practicar el idioma:
No hay mejor manera de aprender mandarín que a través del sencillo vocabulario que utilizan los niños.
Admir también encontró un amigo inesperado en el padre:
El padre me sorprendió con lo mucho que sabe de la historia de Yugoslavia, ¡e incluso de nuestro fútbol!
Gracias a los encuentros organizados por la agencia en Shenzhen, Admir también ha hecho amistad con otros participantes de la zona, pasando juntos el tiempo libre y estableciendo contactos.
A su viaje aún le quedan al menos tres meses, pero algo nos dice que no ha hecho más que empezar. Tú puedes cambiar tu vida de la misma manera: experimentando la magia de Oriente, haciendo nuevos amigos y construyendo conexiones significativas. Inscríbete en nuestro programa y comienza tu propia aventura.
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